ASCO
La brujita Chundarata,
delante de los fogones
y un caldero de hojalata,
hoy practica sus pociones.
La cocina ya está lista,
a punto los ingredientes
que no son, salta a la vista,
ni corrientes ni molientes.
Escamas de dragón rojo,
cogidas el mes de junio,
que llevan puesta en remojo
diez noches de plenilunio.
Los pelos de un ratón gris,
que una mañana de frío
perdió cuando dijo achís,
pueden hacerle el avío.
No se acaba aquí la cosa.
Se trajo del archipiélago,
baba de babosa rosa
y también pis de murciélago.
Si mezcla todo a conciencia
y se lo bebe, es posible,
que con algo de paciencia,
pueda volverse invisible.
Al llevársela a la boca
siente nauseas al instante.
“No me la bebo ni loca,
¡la poción es repugnante!”.
Después del enorme chasco,
la mente se le ilumina:
“Las pociones me dan asco,
¡quiero ser hada madrina!”.
(Carmen Gil)