Fragmento
En Pekín los cuatro hermanos,
Lina, Rita, Tom y Nano,
entrenan con sus papás
y Cucho siempre detrás.
“Yo voy a ser de mayor
la deportista mejor
de todas las Olimpiadas”,
dice Lina entusiasmada.
Un día de fiesta ven
la plaza de Tiananmen.
“Es la más grande del mundo”,
explica el papá rotundo.
Cucho la atraviesa entera
Pega una enorme carrera,
y da una vuelta completa:
¡este perro es un atleta!
A la mañana siguiente
se levantan diligentes
y dice Nano dispuesto:
“Vámonos que hay baloncesto”
Por una calle muy ancha
entran todos en la cancha.
Ya están los equipos hechos.
¡Los niños llegan al techo!
¡Qué niños tan larguiruchos!
Ladra asombrado hasta Cucho.
Miden más de metro y medio:
van a ganar sin remedio.