La princesa está triste.
¿Qué tendrá la princesa? (Rubén Darío)
La princesa está mustia.
La princesa se angustia.
La princesa se aburre.
¿Qué narices le ocurre?
La princesa está triste
por su eterno despiste.
Y es que todo lo pierde:
perdió su guante verde,
su peine, su camisa
y hasta un día la risa.
Y mira que ha buscado
bajo el trono dorado,
en la jaula del loro,
en el orinal de oro…
En el baño de espuma…
Debajo de una pluma
de la cola nupcial
de su pavo real…
En la pomposa barca
del pomposo monarca,
entre su barba rubia,
en las gotas de lluvia…
Y busca que te busca,
con su corona etrusca
de esmeralda y topacio,
ha revuelto el palacio.
Engracia no ha encontrado
su risa en ningún lado;
y está tan seria y sosa,
que la llaman Prinsosa.
Carmen Gil